Le faltó tino al Papa Benedicto en su última visita a África, donde se manifestó en contra de usar condones en la región más afectada por el SIDA (20 millones de personas han muerto por el virus y 22.5 millones están infectados en ese continente). Él recomendó mantenerse puros y castos y simplemente no tener sexo para evitar el contagio.
¿Se habrá puesto a pensar que si a todo el planeta le entra un ataque masivo de «pureza» y dejamos de tener sexo, se extinguiría la raza humana?